“En el futbol no hay lógica y puede haber un poco de suerte”
Enrique “El Gringo” Ninni, un vecino muy ligado al fútbol de nuestra ciudad y al Club Huracán compartió con el programa Dulce Condena de Radio LVA sus emociones tras el homenaje que le realizaron por su larga trayectoria, luego de dejar el pasado 28 de febrero su trabajo de utilero y canchero del club blanquinegro.
“Empecé a los 14 años jugando en las inferiores de La Lola en el futbol agrario y cuando me vine a la ciudad jugué en Atucha, siempre en Segunda. Luego empecé en Primera, tuve la suerte de ganar cuatro campeonatos, después dejé uy no quise seguir jugando más”, recordó sus comienzos.
Allí comenzó su faceta de dirigente en Defensores de Atucha y en 1995 fue presidente de esa institución, donde salió campeón de la Liga Agraria frente a La Lola. Posteriormente, debido a la enfermedad de su hijo, decidió alejarse del fútbol.
Luego el entonces presidente de Huracán, Vicente Llamedo, lo convoca para trabajar en el club como utilero para todas las categorías del club, donde desde entonces se desempeñó con dedicación acompañando todas las vivencias deportivas, las buenas y las malas. A sus tareas, más adelante, se le sumó la de canchero a cargo de mantener el verde césped del estadio Santiago Salas.
Hace cuatro años, recordó con mucha emoción, fue el momento de gloria para el club cuando ganó el Torneo Federal C y ascendió al Federal B, sobre todo la final contra Atlético Miramar. Particularmente recordó el momento del partido de vuelta cuando el estadio estaba lleno de agua y todos trabajaron para que el partido pudiera jugarse.
“Jugamos contra todos jugadores profesionales. Yo siempre digo que en el futbol no hay lógica y puede haber un poco de suerte. Para ellos fue un baldazo de agua fría, no se lo esperaban”, dijo.
“Es la alegría más grande que tengo, fue la frutilla del postre porque la campaña la hice junto con mi hijo. Los jugadores querían que estuviera mi hijo, no podía faltar, y recuerdo cuando terminó el partido la alegría inmensa que teníamos todos”, agregó.
Por otro lado, Ninni agradeció a Llamedo por todo y manifestó que “casi somos hermanos”, además de elogiar su trabajo en el club. En ese sentido indicó que en Huracán se trabajó siempre por darle lo mejor a los jugadores, desde la indumentaria hasta las comodidades del vestuario. “Eso lleva a que Huracán sea un club importante en la zona, no le hacíamos faltar nada y si hacía falta algo llamábamos a Vicente (Llamedo) y él al otro día tenía las cosas”, aseguró.
“Las alegrías, las cosas las tenes que valorar, porque aunque te hagan un pequeño homenaje es lo más importante que vas a tener en tu vida. Tengo un reconocimiento muy grande para Sergio Traut, porque me enseñó muchísimo y ordenó en el vestuario”, dijo.