Néstor Mancini, quien cuenta con una extensa y prolífera trayectoria en el mundo teatral, será homenajeado en la Casa Susana Soba el próximo 29 de abril en reconocimiento a su larga labor poniendo sobre las tablas obras y formando actores, tarea que ahora dejará de realizar.
“Doy un pasito al costado, ya soy una persona grande y no tengo el ánimo que tenía antes para venir todas las semanas desde Buenos Aires. Yo empecé mi carrera en Saladillo y después me fui a Buenos Aires, pero le debo mucho a Saladillo, el pueblo donde nací e hice mis primeros pasos en el teatro”, dijo en una visita a Radio LVA.
Mancini a lo largo de su carrera conformó tres grupos de teatro en Saladillo. El primero fue “Elías Allipi” a sus 20 años en 1953 e integrado por jóvenes, el cual duró casi 20 años presentando una gran cantidad de obras de teatro. Años después crearon el Taller de Arte Contemporáneo con integrantes del entonces grupo del Teatro Comedia dirigido por Roberto Dairiens, el cual duró nueve años primero en el Teatro Español y luego en un local en Sarmiento y Roca.
El último grupo que creó fue “La Escalera” en el Teatro Español, luego de un homenaje a Elías Allipi y por sugerencia del presidente de la Asociación Española de entonces. Este grupo tuvo una gran convocatoria de vecinos que querían participar, y el nombre, contó Manini, fue una sugerencia de Mari Pereita debido a la larga escalera que se debía subir para llegar al primer piso del teatro.
“Siempre tuve la ilusión de formar un grupo en Saladillo. Sabía que acá se habían formado varios grupos, desde 1920, con muchos vecinos que empezaron haciendo obras. Me gustaba ir a Buenos Aires a ver teatro y mi padre me llevaba”, recordó.
Rememorando sus participaciones, Manini comentó que tiene muy lindos recuerdos de cuando le tocaba actuar en diferentes obras como “El hombre que yo maté”, “El caso del hombre de la valija negra”, “El mal amor” y otras más.
Mientras que como director recordó obras como “Gris de ausencia”, “Hay que apagar el fuego”, “Criminal”, y otras que le dejaron una satisfacción. “Me gustan las obras que dejan un mensaje, que le transmita algo al que está en la platea. Tengo recuerdos hermosísimos del teatro, es una trayectoria de 75 años, hoy tengo 90 años de edad. Me da pena dejar el teatro, pero ya hice bastante”, afirmó.